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Polistas que trabajan de... Ginevra Visconti, periodista y escritora

El polo es un ambiente muy ligado en eso de unir pasiones y profesiones. Cosas que van de la mano y que mantienen vivo al deporte. En esta nueva sección que denominamos ‘Polistas que trabajan de otra cosa’, dimos con Ginevra Visconti, una exitosa periodista y escritora italiana que dedica gran parte de su vida al polo. Ginevra es una de las principales caras del polo femenino en Italia e impulsora de la actividad. "El periodismo es una profesión, el polo es pura pasión" (English version)
Nombre y profesión, residencia
Me llamo Ginevra Visconti, soy periodista y escritora, y además administradora de campo. Vivo en Italia.
¿Dónde estudiaste y en qué año te recibiste?
Estudié en la Universidad de Milán y me recibí en Letras con una tesis sobre el periodismo italiano en Argentina. En 2007 me recibí en el Master en periodismo de la Universidad Torcuato Di Tella de Buenos Aires. Hace cuatro años me recibí en Agricoltural Business en la Universidad Bocconi de Milán.
¿Cuál es tu labor/función y a que rama del periodismo te dedicás?
En este momento estoy mucho más metida en el campo pero trato de mantener algún trabajo periodístico free lance. Acabo de publicar mi primer libro, una biografía. Como periodista y escritora me gusta hacer perfiles a personajes de la cultura, empresarios, artistas. Me fascina poder escuchar historias de vidas diferentes y poder contarlas para que se pueda traer alguna inspiración. A futuro me gustaría poder escribir también sobre campo.

¿Cuál fue tu primer trabajo relacionado con tu profesión?
Mi primer trabajo de periodista fue en 2007 en La Nación, donde me quedé durante diez años. Justamente, al no ser el español mi primer idioma, al principio me costó y por eso los perfiles se convirtieron en mi rubro favorito. A pesar de que me divertía mucho conocer personajes de la cultura argentina, grababa siempre las entrevistas y de esta forma, cuando las desgravaba, con vocabulario a la mano aprendía nuevas palabras y formas de decir. Al mismo tiempo los perfiles quedaban muy auténticos y eso siempre era muy apreciado.
¿Cuándo y por qué arrancaste con el polo?
Desde que tengo recuerdos de mi vida me veo arriba de un caballo. Con una sonrisa. Nada me gusta más que estar arriba y en compañía de un caballo. Empecé a montar de muy chiquita, y hice un poco de todo: paseos, salto, cross country, adiestramiento. Lo importante era estar con los caballos. Al estar viviendo más de diez años en Argentina no podía no probar el polo. Y así se fue dando, con muchos amigos (Francisco Soldati, Paul Pieres, Veronica Posse), que me iniciaron a ese deporte confiando en que era buena amazona. La verdad es que para ser buena jugadora se necesita mucho más que ser buena jineta y al principio no me lo tomé demasiado en serio. En esa época tenia chicos chiquitos y trabajaba en el diario, tampoco tenía tanto tiempo.

¿Qué tiempo en la semana le dedicás al trabajo y cuánto al polo?
Trabajo muchísimo y viajo con frecuencia. Por suerte puedo manejar mi tiempo, así que trato de hacer la mayoría del trabajo en invierno para estar más libre cuando arranca la temporada. Trato de jugar una o dos prácticas (o taqueos) por semana, y trato de jugar lo más posible en el fin de semana.
¿Cómo encontrás espacios para disfrutar del polo?
Es una pelea familiar continua y infernal. A veces manejo 350km para llegar a una prática…no importa donde esté en ese momento. Lo hice varias veces, pero no lo recomiendo…

¿Qué es lo que más te gusta de tu profesión? ¿Y del polo?
Las dos cosas me dan adrenalina y libertad. Cuando se publica una nota mía en un diario es como llevar la bocha de punta a punta de la cancha y meter gol. Sin dudas me sale mejor lo primero…
¿Cómo ves el periodismo relacionado al polo hoy en día?
Ha crecido mucho el periodismo de polo y creo que está bueno mostrar otros aspectos de la gente del polo. No solamente jugadores, sino domadores, veterinarios, petiseros, herreros, sponsors, organizaciones, lugares. Es un mundo el polo, y hay muchas historias para contar.

¿Qué sentís al ser una de las caras principales del polo femenino en Italia?
No siento eso para nada. Somos tan pocas mujeres jugando acá…En Italia juego desde hace 5 años. Llegué de grande al polo. Arranqué a los 30 años en Argentina y tengo 46. Hace unos meses me lesioné un hombro y me están remplazando mis hijos, que juegan mucho mejor que yo. Yo sueño de mudarme al campo, criar, escribir…
¿Qué opinan tus colegas sobre tu participación en el mundial y que seas una de las principales representantes del polo?
Habría que preguntarle a ellas. De parte mía, nuestro equipo que se formó en 2017 (con Ginevra D’Orazio, Costanza y Vittoria Marchiorello), con quien ganamos el primer oro europeo femenino a Chantilly, quedará en la historia y entre los mejores recuerdos de la vida. Cuatro italianas puras en el podio y con la medalla al cuello. Un sueño. Fue un trabajo de equipo increíble desde el primer día, y cada una puso el corazón…Es así que se gana.
El segundo oro al Europeo de Milán el año pasado, fue otro sueño cumplido, no obstante las dificultades que tuvimos.
El Mundial ya fue otro capitulo. Seguramente fue para mí la mejor manera para despedirme de la remera nacional italiana. Necesitamos nuevas levas!!

¿Qué punto de comparación encontrás entre ambas profesiones/actividades?
Es un desafío…El periodismo es una profesión, el polo es pura pasión, diversión. Nunca hubiese pensado de llevar la remera italiana, pero en esos momentos hay que meterle un serio desempeño. Al Europeo de Milán llegué entrenada y con los caballos puestísimos después de haber jugado muchísimo, y buen polo, durante el verano. Al Mundial llegué mal, después de un invierno sentada en la computadora a terminar mi libro, sin entrenamiento, sin mis caballos. Zafé, pero el polo es un deporte que no permite esas cosas, especialmente si tienes que hacerlo profesionalmente.
¿Podrías vivir sin uno de ellos?
No creo…pero hay que mentalizarse en que las cosas cambian, el mundo cambia, la vida cambia. Hay que disfrutar, agradecer todos los días y saber transformar las cosas cuando llega el momento de cambiarlas.
Polistas who work as... Ginevra Visconti, journalist and author

Polo is an atmosphere that is very closely linked to that of unifying passions and professions. Things that go hand in hand and keep the sport alive. In this new segment that we call 'Polistas who work in something else', we met Ginevra Visconti, a successful Italian journalist and writer who dedicates a great part of her life to polo. Ginevra is one of the main names in women's polo in Italy and a driving force behind the activity. "Journalism is a profession, polo is pure passion."
Name and profession, residence
My name is Ginevra Visconti, I am a journalist and writer, as well as a field manager. I live in Italy.
Where did you study and in which year did you graduate?
I studied at the University of Milan and graduated in Literature with a thesis on Italian journalism in Argentina. In 2007 I graduated from the Master in Journalism at the Torcuato Di Tella University in Buenos Aires. Four years ago I graduated in Agricoltural Business at the Bocconi University in Milan.
What is your job/function and what branch of journalism do you work in?
At the moment I am much more involved in the farm but I try to keep some freelance journalistic work. I have just published my first book, a biography. As a journalist and writer I like to do profiles of cultural figures, businessmen, artists. It fascinates me to be able to listen to stories of different lives and to be able to tell them so that they can bring some inspiration. In the future I would like to be able to write about the great outdoors as well.

What was your first job related to your profession?
My first job as a journalist was in 2007 at La Nación, where I stayed for ten years. Exactly, since Spanish was not my first language, at the beginning it was hard for me and that's why profiles became my favorite subject. Although I had a lot of fun getting to know characters of the Argentinean culture, I always recorded the interviews, and in this way, when I downloaded them, with vocabulary at hand, I learned new words and ways of saying. At the same time, the profiles were very authentic and that was always appreciated.